A veces realizo sesiones de retrato.
Es una disciplina que cada día me interesa más.
Hacer buenos retratos es difícil, tanto por la técnica fotográfica como por la sintonía y confianza mutua que debe existir entre el fotografiado y el fotógrafo.
Aquí pongo algunos ejemplos, que aunque no son los mejores que he hecho, sí son de los que más me gustan.